OCLUSIÓN

La Oclusión es una especialidad de la odontología que se encarga de mantener y/o lograr una relación funcional entre los componentes del sistema masticatorio, esto incluye los dientes, tejidos de soporte de las piezas dentarias, musculatura, articulación mandibular y huesos de la cara y el cráneo.

La patología de la Oclusión que más frecuentemente es tratada es el bruxismo.

¿Qué es el bruxismo?

Es el hábito persistente y habitual de frotación y rechinamiento dentario sin un propósito funcional. Esto corresponde a una patología que tiene factores predisponentes, como contactos anómalos entre dientes de arcadas opuestas, y factores desencadenantes tales como estrés, carácter introvertido, tipo de dentadura, posición que se adopta para dormir etc.

La combinación ambos factores es la responsable de inducir el hábito de apretar y rechinar los dientes. Cuando un individuo  siente fatigado, una manera de descargarse es apretando los dientes, mayormente cuando se está dormido.

¿Cuáles son los signos y síntomas del bruxismo?

A nivel dentario podemos encontrar facetas de desgaste, erosiones en el cuello de los dientes, movilidad dentaria facial y cervical y fracturas de esmalte. Mientras que en tejidos blandos se puede producir fatiga y dolor muscular, hipertrofia muscular, dolores de cabeza y alteraciones de la audición. La sobrecarga muscular que se produce en el paciente que bruxa es causante del 50% de los dolores de cabeza.

¿Qué secuelas puede tener el bruxismo?

Desgaste de piezas dentarias, pérdida de tejido de soporte de los dientes, movilidad y pérdida de dientes lesiones traumáticas de la articulación mandibular.